Contaminación del aire
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el agua está contaminada cuando su composición se haya alterado de modo que no reúna las condiciones necesarias para ser utilizada beneficiosamente en el consumo del hombre y de los animales. La contaminación del agua afecta a ríos, acuíferos y mares, que se convierten poco a poco en verdaderos basureros. Como denuncian organizaciones como Greenpeace, cientos de sustancias tóxicas son arrojadas al agua sin un control adecuado: al año se vierten al agua en España más de 4,6 millones de toneladas de contaminantes. Entre ellos, encontramos vertidos de aguas negras (urbanos e industriales), de petróleo, productos fitosanitarios (como plaguicidas), abonos, pesticidas, detergentes y otros productos nocivos para el medio ambiente. Por su parte, los ecologistas de WWF destacan que la agricultura constituye el contaminador difuso más importante de España. La contaminación por nitratos en las aguas subterráneas se debe a la infiltración de los fertilizantes agrícolas, de los cuales se usan en España aproximadamente 1.700 toneladas al año.
Las principales fuentes de contaminación del aire son:
- Vehículos automotores
- Fábricas e industrias
- Incineradores domésticos (estufas y cocina de gas)
- Trituración de materiales en fábricas y canteras.
- Uso de sustancias solventes y volátiles en las industrias
- El cigarrillo